El Castillo de Villalba, es uno de los ejemplos más claros de la dejadez que hacen nuestras autoridades de nuestro patrimonio cultural, el patrimonio de todos que, paso a paso, piedra a piedra, torre a torre y muro a muro se va destruyendo sin remedio desapareciendo de nuestro entorno y de nuestra memoria colectiva. Pertenece a la población toledana de Cebolla y, sus partes más antiguas datan de los siglo XII y XIII. Probablemente hubo anteriormente aquí una fortificación romana que posteriormente fue acondicionada en la época del Califato de Córdoba.
Fue conquistada por la Orden del Temple y más tarde pasó a pertenecer a distintas familias nobles, siendo hoy propiedad de los condes de Deleytosa que lo han dejado en la ruina total. El recinto está ubicado en lo alto de un cerro que domina la vega del tajo y la calzada romana de Antonino Pío. De hecho, se han encontrado en éste mismo lugar vestigios romanos. En definitiva, en enclave con más de mil años de historia, por donde han pasado romanos, árabes y, la Orden del Temple, donde todos ellos quisieron dejar su impronta para la posteridad pero que, nuestras autoridades y nuestros nobles han dejado de lado y en la más mísera ruina.
¡¡A pesar de todo, conoce y vive España!!
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