Aquí te quiero mostrar todos los castillos que he visitado junto a mi mujer, te cuento lo que nos han parecido, te muestro algunas fotos de las que hemos hecho, te cuento su historia y si las hay, algunas anécdotas, curiosidades o leyendas.
    Si te gustan los castillos, este es tu blog. Puedes usar el buscador para encontrar algún castillo en concreto, puedes buscar por provincias o regiones y en definitiva, un sitio donde puedes encontrar información que te puede ayudar en tus viajes y visitas. 

    ¡¡Bienvenido!!

Menú flotante

jueves, 6 de junio de 2024

Castillo de Cuellar (Segovia) ⭐⭐⭐⭐☆

     El castillo de Cuellar o de los Duques de Alburquerque es inmenso. Bueno, para ser precisos el castillo es una parte y justo al oeste del castillo, propiamente dicho, se encuentra un gran recinto diáfano, con la iglesia de San Martín al fondo con su cementerio, que se está excavando actualmente. Este recinto está amurallado y es donde se ubicaba la ciudadela. El castillo en si, perteneciente al Duque de Alburquerque actualmente, tiene una gran historia, tanto desde sus orígenes como hasta nuestros días. Actualmente, acoge un instituto de enseñanza obligatoria (anteriormente fue un instituto de formación profesional desde 1975 hasta 1996), acoge el museo, la oficina de turismo y es sede de la Fundación De La Casa Ducal De Alburquerque que ocupa la Torre del Homenaje.





     Anteriormente fue prisión para presos políticos desde 1938 hasta 1966 con un paréntesis dedicado a sanatorio para tuberculosos. Fueron protagonistas de una fuga cinco reclusos que hicieron un agujero en el muro del Torreón  de Santo Domingo, para descolgarse anudando sábanas que no aguantaron el peso. En 1968, fue escenario de una película, América Rugiente. Desde 1966 hasta 1972 en que se empezaron las obras de rehabilitación para instalar el instituto de formación profesional, el castillo estuvo abandonado y fue objeto de expolio y pillaje. Se valoró también, antes que instituto, convertirlo en Parador Nacional.





    Pero vamos a los orígenes del castillo que, desde el siglo XIII al XVIII fue recogiendo una gran mezcla de estilos arquitectónicos, predominando el renacentista y el gótico. En sus muros trabajaron numerosos arquitectos (aunque, para mi, un mucho ignorante, ninguno conocido). Entre sus antiguos propietarios, destacamos a Don Álvaro de Luna, Beltrán de la Cueva, I Duque de Alburquerque así como los sucesivos  herederos del ducado. Moradores ilustres también fueron Juan I de Castilla y su esposa Leonor que falleció aquí, María de Molina que pidió refugio en el castillo, el escritor José de Espronceda y El Duque de Wellington que estuvo aquí acuartelado durante la Guerra de la Independencia. 





    El castillo de Cuellar, se encuentra en lo alto de una colina, sobre la denominada ciudadela y cerrando el recinto amurallado. Resulta curioso que distintos reyes castellanos desde Alfonso X, el sabio, hasta al menos Juan II, otorgaran al Concejo de Cuellar la posibilidad de invertir la recaudación de ciertas multas, en la rehabilitación de las murallas o el castillo. En 1433 Juan II otorga la Villa de Cuellar al Condestable Álvaro de Luna desposeyendo de la misma a Fabrique de Luna, caído en desgracia frente al rey, pero Fabrique, se opuso a ello y, renegando del rey, hizo entrega del señorío a su hermana Violante, por lo que hubo al mismo tiempo dos Señores de Cuellar.





    Poco después, en 1439 el condestable fue desterrado de la Corte y Juan II se lo cedió al Rey de Navarra hasta que en 1444 volvió a dárselo Don Álvaro, que continuó con las obras iniciadas en el período anterior. En 1453, el Condestable es acusado de traición y fue ajusticiado en Valladolid el 2 de junio. Tras la muerte de este, el castillo pasa a la Corona castellana y poco después es otorgada a la Infanta Isabel. Enrique IV tenía gran predilección por Cuellar donde celebró sus primeras cortes, negándose a aceptar la voluntad de su padre y quiso manejar el señorío como suyo, hasta que para hacerse con el, pagó a su hermana 200.000 doblas de la Banda para su dote y casamiento. 





    En 1964, pasa a Beltrán de la Cueva, su valido, con la condición de que abandonara el Maestrazgo de la Orden de Santiago y que se ausentara de la Corte, sobre todo para acallar la voces que decían que la hija de Enrique IV, El Impotente, Juana, era hija de Beltrán (de ahí que fuera apodada Juana La Beltraneja). Beltrán, a pesar de que el castillo y la villa eran herencia de Isabel, tomó posesión de Cuellar e hizo reformas en el castillo para dotarlo de más defensas para oponerse al deseo de la Infanta Isabel de recuperar la plaza. Además, firmó acuerdos con otros nobles para asegurar esa posesión.





    Cuando en 1474 la Reina Isabel sube al trono, Beltrán la escribe una carta con ciertas peticiones, la primera, pedía a su alteza el reconocimiento que tiene del señor Rey Don Enrique de todos los señoríos incluido el de Cuellar y el ducado de Alburquerque. La reina, junto a su marido Fernando de Aragón, accede y además, el rey hace que su padre Juan II de Aragón, cediese a Beltrán todos los derechos que pudiera tener sobre la villa de Cuellar. El duque, pasó de temer un ataque de la reina Isabel, a ser bien visto en la corte, sobre todo por su participación en la Batalla de Toro en el marco de la Guerra de Sucesión Castellana en favor de Isabel y en contra de la apodada La Beltraneja en su honor (ironías medievales). 





    Hasta 1811 con la abolición de los señoríos la villa y su castillo siguieron perteneciendo al ducado en las personas de los sucesivos herederos del ducado y, todos ellos continuaron con las obras del castillo, convirtiendo al mismo en un precioso palacio renacentista. A partir del siglo XVIII, los duques se trasladan a la corte madrileña y el castillo pasa a ser lugar de ocio y vacacional, pero cada vez, menos frecuentado, por lo que empieza su declive y, las escasa noticias sobre el castillo, son las que dan cuenta de algún hundimiento de alguna techumbre que, a decir verdad, son reparadas puntualmente por los duques, aunque sin mostrar mucho interés en el castillo ni en la lujosa vajilla y cubertería de plata que allí estaba ni, en los lujosos y valiosos lienzos de pintores reconocidos, ni en la rica armería.






    En definitiva, un gran castillo que, sobre todo, alberga mucha historia, tanto antigua, como nueva y, que sigue dando servicio a la población segoviana.


    ¡¡Conoce y vive España!!



















































 

No hay comentarios:

Publicar un comentario